Vélib es el bicing parisino, que proviene de la contracción vélo (bicicleta) y liberté (libertad). Parece que en la capital francesa el servicio no sería precisamente el problema, como los en nuestra quedida Barcelona. Desde que está en funcionamiento (julio 2007) el ayuntamiento de París ya ingresado más de 20 millones de euros y se han contabilizado 42 millones de viajes. La empresa que se encarga de la gestión JCDecaux, la cual ha firmado un contrato de explotación de los paneles publicitarios durante 10 años, ya ha realizado ya ha realizado 1250 estaciones, y se compremete a extenderlas por la periferia parisina (unas 300 estaciones más).
Allí el problema es otro. El vandalismo esta empañando el gran éxito del Vélib, 7.800 bicicletas desaparecidas y 11.600 víctimas de vandalismo es el recuento total de 18 meses de actividad. El uso que algunos ciudadanos hacen de esta libertad --bicis rotas, desmontadas, quemadas, lanzadas al Sena e incluso vendidas en países lejanos-- ha superado las peores previsiones de la empresa, que gestiona los 20.000 vehículos que circulan por la ciudad. Según sus cálculos, si los talleres dejaran de trabajar 10 días, no quedaría ningún vélib en la capital francesa.
Fotografía tomada del blog
http://www.okitalia.co.kr/zbxe/tv/6454
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