Agra.

Agra, después de Delhi, es seguramente una de las ciudades más turísticas y visitadas de la India. La principal razón es porque se encuentra el magnífico y maravilloso Taj Mahal. El trayecto en tren Delhi - Agra ha tenido una duración de 2 horas y 6 minutos y un módico precio de 800 INR (unos 10 euros). Un pequeño desayuno, una botella de agua y un diario de la región han sido los extras en este corto viaje (todo un lujo).

El lugar elegido para dormir es el Hotel Sheela. Es un hotel tranquilo, con habitaciones sencillas (una cama y una ducha) y muy limpias. Está a tan sólo un minuto del Taj Mahal y a poca distancia del Agra Fort, Mausoleo de Akbar e Itimad-Ud-Daulah.

Para visitar el Taj Mahal, mejor a primera hora de la mañana (abren a las 6) ya que así te evitas tanto el agobiante calor como las largas colas. No pienso describir lo que se siente al llegar allí. Es una de la siete maravillas y es casi imposible no haberlo visto en alguna fotografía. Lo único que soltará mi boca es que no decepciona y que antes de morir hay que sentarse en frente de él y gozar del momento. Tan sólo eso.